Esta es una forma de oración muy fácil y provechosa que nos ayuda a la purificación del corazón, que es el fundamento sobre el que se construye toda oración o crecimiento en la vida espiritual.

Consiste en dedicar alrededor de un minuto a cada uno de los Diez Mandamientos (los encontrarás en Éxodo, capítulo 20:1-17 y Deuteronomio, capítulo 5:6-21), reflexionar sobre su significado y objetivo, y sobre tu propia observancia. de ellos.

No se trata sólo de un examen de conciencia o de un inventario de los pecados cometidos. Puede ser eso también, por supuesto, pero el objetivo es llegar a una apreciación más profunda del espíritu detrás de cada mandamiento: ¿qué deseo en el corazón de Dios se expresa en este mandamiento? ¿A qué estado de ánimo y de corazón debe llevarnos la observancia de este mandamiento? ¿Cómo pudiste pecar contra el espíritu del mandamiento, aunque guardaste la letra de la ley?

Por ejemplo, el Primer Mandamiento dice: "Yo soy el Señor, tu Dios. No tendrás otros dioses fuera de mí". Si nunca has adorado a un ídolo, ¿qué compite con Dios en tu vida? ¿Qué impide que Dios sea Todo para ti? ¿Es Jesús el "Alfa y la Omega, el Primero y el Último, el Principio y el Fin" en tus deseos, tus planes, tus prioridades? (Ver Apocalipsis 22:13)

O, "No tomarás el nombre del Señor, tu Dios, en vano": Aparte de maldecir (¡vale la pena investigarlo, de todos modos!), ¿cómo has mostrado falta de respeto hacia algo o alguien que lleva el nombre de Dios, refleja Su belleza, es creado a su imagen? ¿Qué pasa con la reverencia en la iglesia y fuera de la iglesia por todas las personas y cosas? ¿Tu lenguaje, tu vestimenta, tu comportamiento, tu lenguaje corporal expresan esta reverencia?

En esta oración puedes detenerte en cualquier Mandamiento siempre y cuando tengas pensamientos sobre él o sientas devoción. Pero si comienzas a distraerte o si no tienes pensamientos en aproximadamente un minuto, pasa al siguiente. (Si ves que te has quedado corto en la observancia de algún Mandamiento, puedes decir un Padre Nuestro antes de pasar al siguiente, sólo para pedir perdón y ayuda para el futuro. (Ver Ejercicios Espirituales, "Primer Método de Oración). "Este método se puede utilizar sobre los Mandamientos, sobre los siete Pecados Capitales, sobre la forma en que utilizas tus cinco sentidos o tus poderes de memoria, imaginación, intelecto y voluntad, etc. También se puede utilizar para orar sobre los dones. y frutos del Espíritu Santo: ver Isaías 11:2-3 y Gálatas 5:22-23).